EULÀLIA BORRUT CASAS
Eulàlia Borrut ha desarrollado su motor creativo en dos vertientes complementarias: el oficio de creadora de espacios (diseñadora de interiores, para la Escola Llotja de Barcelona) y la vocación de la creación artística pura (a partir de su licenciatura en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona). En una, como profesión, ha cultivado los espacios humanos, y últimamente sobre todo espacios museísticos, donde ha aportado su capacidad de concebir universos nuevos, jugando con las tecnologías multimedia más avanzadas. En la otra, su trayectoria es amplia, continuada, y siempre adentrada en la complejidad de una reflexión sobre el ser y la naturaleza, sobre una mirada interior que analiza críticamente lo que es ser humana, y una mirada exterior, contemplativa, hacia una naturaleza que no deja de ser proyección de lo más íntimo e intransferible.
UNA SINGLADURA QUE LA LLEVA A LA MADUREZ
Los inicios de Eulàlia Borrut como artista son una explosión de éxito. Concursos ganados, participación en exposiciones colectivas y una beca de creación que la ayudó a definirse como artista (Beca Fundación Güell). Aquí plantó las raíces de una obra que se ha ido desarrollando con momentos de mayor o menor intensidad productiva, pero sin detenerse jamás. La pasión por su profesión como diseñadora de espacios ha hecho que en determinadas épocas bajase el ritmo en la creación pura abocada en el papel y las telas, los lápices y la pintura.
Pero ahora retorna para mostrar cómo su camino creativo ha valido la pena, cómo el trabajo y la persistencia la han conducido a una madurez creativa que rompe moldes y supera encasillamientos. La gran artista que lleva dentro se desarrolla ahora con obras de formato medio y grande donde su pulsión creativa encuentra un momento de esplendor. Y con pequeñas obras que son como joyas por la pulcritud y la potencia a la hora de recrear sus mundos. Y siempre manteniendo su personalidad poliédrica, compleja, luminosa.
UNA SINGLADURA QUE LA LLEVA A LA MADUREZ
Los inicios de Eulàlia Borrut como artista son una explosión de éxito. Concursos ganados, participación en exposiciones colectivas y una beca de creación que la ayudó a definirse como artista (Beca Fundación Güell). Aquí plantó las raíces de una obra que se ha ido desarrollando con momentos de mayor o menor intensidad productiva, pero sin detenerse jamás. La pasión por su profesión como diseñadora de espacios ha hecho que en determinadas épocas bajase el ritmo en la creación pura abocada en el papel y las telas, los lápices y la pintura.
Pero ahora retorna para mostrar cómo su camino creativo ha valido la pena, cómo el trabajo y la persistencia la han conducido a una madurez creativa que rompe moldes y supera encasillamientos. La gran artista que lleva dentro se desarrolla ahora con obras de formato medio y grande donde su pulsión creativa encuentra un momento de esplendor. Y con pequeñas obras que son como joyas por la pulcritud y la potencia a la hora de recrear sus mundos. Y siempre manteniendo su personalidad poliédrica, compleja, luminosa.
